There are culprits and they must pay
The number of victims caused by the passage of the DANA (Isolated Depression at High Levels) through the East of the peninsula is horrifying. Dozens of towns in the Valencian Country, Castilla-La Mancha, Andalusia, Catalonia, and Aragón have been affected by the catastrophe. The human and material cost is already incalculable.
The symbol of this horror is Valencia City, whose southern part has been totally flooded, just like the parishes on the right bank of the Turia River. When we are writing this statement, there are more than 90 dead, an undetermined number of missing people, and an innumerable number of people whose lives have been devastated.
First, the PCTE wants to convey its condolences to the families of the fatal victims, express its full support to all the affected people, and thank the work made by firefighters and rescue teams in the relief efforts that are still ongoing and also those yet to begin. Thousands of people exercised their solidarity and have risked their lives in order to help. They are one more example that, in the worst moments, only the people save the people.
Second, the PCTE wants to denounce the culprits of this tragedy. Such kind of catastrophes may have natural causes, but their consequences and intensity have much to do with the capitalist policies and interests.
The environmental depredation of capital is a fact. If business profits are prioritized in a society, then the management of the territory, natural resources, and urban planning are subdued to a purely commercial logic, in which the lives and the interests of the majority of the population are secondary issues.
Furthermore, this same logic rules when the working class is forced to stay at their workstations despite the alerts and emergency warnings. While this statement is being written —with the red alert being expanded to more than 10 Spanish provinces—, no public authority has called to completely stop the production nor cease any service that is not required to address emergencies. Employers and administrations are culprits of this situation.
In this context, the mutual accusations between the different political forces managing capitalist interests are a really bad joke. These are the forces that, from the different administrations, have constantly neglected their responsibility to work for the prevention of this kind of situations. This prevention should be multifaceted and has to do not only with environmental protection, but also with urban, infrastructural, and production planning.
We state with no reservation that catastrophes like this one can actually be foreseen and prevented with enough time thanks to the scientific-technical means available. Likewise, there are more than enough material resources to make an urban and infrastructural planning that does not put the population into risk. However, in order to do so, the precondition is to put all the economic, technological, and scientific means at the service of the majority, via a centrally planned economy, scientifically capable of making a rational use of resources and managing them for the sake of the working-class majority.
PCTE Press Office
30/10/2024
El PCTE ante la tragedia originada por la DANA
Hay culpables y deben pagar
Las cifras de víctimas que está dejando el paso de la DANA por el Este de la península son escalofriantes. Decenas de poblaciones del País Valenciano, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña y Aragón se han visto afectadas por la catástrofe y el coste humano y material es ya incalculable.
El símbolo del horror está siendo la ciudad de Valencia, cuya zona sur y pedanías de la margen derecha del río Turia han quedado completamente anegadas. En el momento en que escribimos esta nota se cuentan más de 90 muertos, un número indeterminado de desaparecidos y una cantidad innumerable de personas que han visto su vida arrasada.
En primer lugar, el PCTE quiere transmitir sus condolencias a las familias de las víctimas mortales, expresar su pleno apoyo a todos los afectados y agradecer la labor realizada por bomberos y equipos de rescate en las tareas de socorro que todavía se desarrollan y en las que están por comenzar. Miles de personas ejercen la solidaridad y han arriesgado su vida para ayudar y ellas son un ejemplo más de que, en los peores momentos, sólo el pueblo salva al pueblo.
En segundo lugar, el PCTE quiere denunciar a los culpables de esta tragedia. Las catástrofes de este tipo pueden tener unas causas naturales, pero sus consecuencias y su intensidad tienen mucho que ver con las políticas y los intereses capitalistas.
La depredación ambiental del capital es un hecho. Si lo que prima en una sociedad es el beneficio empresarial, entonces la gestión del territorio, de los recursos naturales y el urbanismo se someten a la lógica puramente mercantil, donde las vidas e intereses de la mayoría de la población son aspectos secundarios.
Además, esta misma lógica es la que impera cuando se obliga a la clase obrera a permanecer en el puesto de trabajo a pesar de las alertas y los avisos de emergencia. En el momento en que se escribe esta nota, con la alerta roja expandiéndose a más de 10 provincias españolas, ninguna autoridad pública ha llamado a parar por completo la producción y cesar todo servicio que no sea el mínimo necesario para atender emergencias. Empresarios y administraciones son culpables de esta situación.
En este contexto, las acusaciones mutuas entre las distintas fuerzas políticas gestoras de los intereses capitalistas son una broma de muy mal gusto. Son esas fuerzas las que, desde las distintas administraciones, han hecho dejación constante de su responsabilidad de trabajar en la prevención de este tipo de situaciones. Una prevención que debe ser multifacética y que tiene que ver no sólo con el cuidado del entorno natural, sino también con la planificación urbanística, de las infraestructuras y de la producción.
Afirmamos con rotundidad que catástrofes como esta sí se pueden prever y prevenir con la suficiente antelación con los medios científico-técnico disponibles, al igual que sobran los recursos materiales para hacer una planificación urbanística y de infraestructuras que no ponga en riesgo a la población. Pero para ello es condición previa poner todos los medios económicos, tecnológicos y científicos al servicio de la mayoría, a través de una economía planificada central y científicamente capaz de realizar un uso racional de los recursos y gestionarlos de forma favorable a la mayoría trabajadora.
Oficina de Prensa del PCTE
30/10/2024